Facilitando la toma de poder de la OMS: el regreso de David Cameron, compinche de Bill Gates

El regreso del ex primer ministro británico David Cameron al cargo de ministro de Asuntos Exteriores afirma que el principal objetivo del Estado británico es, en realidad, impulsar las vacunas. En un giro inquietante de los acontecimientos tras un fin de semana de castigo en las calles de Londres provocado por la guerra de Gaza -que ha dejado al país política y socialmente fracturado como nunca antes- el actual primer ministro Rishi Sunak decidió hacer una remodelación del gabinete que casi con toda seguridad tenía menos que ver con esos acontecimientos que con la promoción de los próximos acuerdos de la OMS a principios del mes que viene (pero para los que, por supuesto, los acontecimientos del fin de semana fueron una distracción dolorosa y útil). Mi conjetura es que Sunak no nombró a Cameron para salvar su propio pellejo político (en realidad le hizo quedar aún más en ridículo), sino más bien para complacer a Bill Gates.

En junio de 2011 fui uno de los diez manifestantes que protestaron frente a un hotel de la City de Londres en el que David Cameron, en presencia de Gates, firmó para que el Gobierno británico se convirtiera en el principal financiador de GAVI, la Alianza Mundial para Vacunas, momento a partir del cual, sin debate ni consulta democrática, el Reino Unido empezó a verter obscenos miles de millones del dinero de los contribuyentes en la industria/cartel mundial de las vacunas.

Se podría haber pensado que, a pesar de lo atroz de este suceso, se trataba de algo accesorio a los asuntos más amplios del gobierno, pero de hecho resulta que probablemente era temático. El diputado británico disidente Andrew Bridgen ha contado cómo, siendo un nuevo diputado conservador en 2010, asistió a la primera reunión parlamentaria del partido a la que se dirigió el primer ministro Cameron, pero en lugar de la esperada charla de ánimo, Cameron trajo consigo a Bill Gates, ¡que dio a los diputados conservadores una conferencia sobre sus productos de vacunación(a partir de las 3.30)! Es cierto que este no fue el comienzo de la asociación de Gates con el gobierno británico, ya que Gordon Brown -más tarde partidario del Gobierno Mundial Único y embajador de la OMS para recaudar fondos- lo había contratado como consultor de negocios en 2006 (como si hubiera alguna razón para que Gates se preocupara por el bienestar de los ciudadanos británicos o les fuera leal). En junio de 2020, en un discurso en gran medida oculto al electorado británico, Boris Johnson, en compañía de Gates, aclamaba a GAVI como la nueva OTAN.

En particular, el regreso de Cameron debe considerarse a la luz del nombramiento anterior de Sunak -cuando llegó al cargo en octubre del año pasado- del parlamentario Andrew Mitchell también para un puesto en el Ministerio de Asuntos Exteriores. Mitchell también fue durante mucho tiempo colaborador de Gates, que estuvo presente en la reunión de GAVI de 2011 y llevaba diez años sin trabajar en el Gobierno tras un altercado con un policía de Downing Street. Al igual que Cameron, no se esperaba que volviera al cargo. Ahora, a falta de apenas dos semanas, estos dos caballeros están en la mejor position para facilitar la aprobación de los acuerdos de la OMS y negociar la soberanía del pueblo británico sin el más mínimo escrutinio parlamentario.

Aún más desconcertante es la profunda implicación de Cameron en el escándalo Greensill, del que incluso Wiki informó con franqueza:

Durante el primer mandato de Cameron, el financiero Lex Greensill, era un asesor no remunerado que tenía acceso a once departamentos del Gobierno…. En 2018, Cameron se convirtió en asesor de Greensill Capital y poseía opciones sobre acciones de la compañía… supuestamente por valor de hasta 60 millones de dólares, además de cobrar más de un millón de dólares cada año por 25 días de trabajo al año.Una investigación de Panorama concluyó que, en total, a través de una combinación de su salario y la venta de acciones, Cameron ganó alrededor de 10 millones de dólares antes de impuestos por 30 meses de trabajo a tiempo parcial.

En 2019, Cameron organizó una reunión privada con Lex Greensill y el Secretario de Estado de Salud y Asistencia Social, Matt Hancock; bajo Hancock, varios fideicomisos del NHS ( Servicio Publico de Salud) pasaron a utilizar la aplicación Earnd de Greensill Capital. En 2020, unos meses antes de la quiebra de Greensill Capital, Cameron presionó al Gobierno para que flexibilizara las normas y le permitiera recibir préstamos del Mecanismo de Financiación Empresarial Covid…Envió varios mensajes de texto al Ministro de Hacienda, Rishi Sunak, quien finalmente se negó a ayudar a Greensill; Cameron también mantuvo diez reuniones virtuales con los secretarios permanentes Tom Scholar y Charles Roxburgh para tratar de obtener dinero para Greensill… El British Business Bank, propiedad del gobierno, prestó a Greensill hasta 400 millones de libras a través de un plan diferente, lo que supuso una pérdida potencial de 335 millones de libras para el contribuyente…

Entonces, ¿qué posible motivo podría tener Sunak para rehabilitar ahora a Cameron?

Este artículo fue publicado originalmente por Age of Autism el 15 de noviembre y reproducido aquí con el amable permiso del autor y los editores.

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