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Las muchas falsedades de la directora de la AEM, Emer Cooke

¡Este clip de 6 minutos grabado de la reunión del 27 de marzo de 3 horas del Parlamento Europeo del Comité Especial sobre la pandemia de COVID-19 es una visita obligada!

El eurodiputado Robert Roos, de los Países Bajos, exigió respuestas a la antigua lobista de la Big Pharma, la Directora Ejecutiva de la AEM, Emer Cooke, sobre las siguientes áreas:

  1. Hay muchos testimonios de que Pfizer falsificó los datos de sus ensayos clínicos: ¿Sigue confiando la AEM en los datos de los fabricantes o dispone de información independiente sobre seguridad?
  2. Según el informe de evaluación del regulador australiano de medicamentos, las nanopartículas lipídicas no permanecen en el lugar de la inyección, sino que se desplazan al bazo, el hígado y los ovarios: ¿sabía la EMA antes de la aprobación de la vacuna que se propaga por todo el cuerpo?
  3. Pregunta personal a la Sra. Cooke: Con los conocimientos que tenemos ahora, ¿sigue convencida de que el proceso y la aprobación de las vacunas por parte de la AEM fue lo correcto?

La Sra. Cooke admitió que «la mayoría de los datos proceden de las empresas..»

Mentira nº 1: «…pero pedimos datos adicionales y hacemos algunas investigaciones independientes nosotros mismos»

¿De verdad, señora Cooke? Por mi parte, junto con el resto del público, me gustaría ver la investigación independiente de la AEM sobre estas vacunas experimentales COVID-19.

Mentira nº 2: Continuó diciendo: «Además, controlamos toda la literatura, de modo que si surge algo de cualquier estudio, lo tendremos en cuenta para intentar evaluar si es necesario imponer alguna restricción

¿Cómo es que su equipo permaneció en silencio y no evaluó los numerosos estudios en la literatura científica que muestran que las vacunas de ARNm causan daño al estar vinculadas a eventos adversos. ¿O es que sólo se fijaron en los estudios financiados por las compañías faramacéuticas y/o escritos por expertos médicos con importantes conflictos de intereses?

Mentira #3: La Sra. Cooke declaró: La AEM se toma las acusaciones de falsificación de datos «muy en serio y cualquier mala conducta» da lugar a investigaciones específicas y posibles insepciones.

Como periodista de investigación, he llamado la atención de la AEM sobre pruebas que sugieren claramente que Pfizer/BioNTech falsificó sus resultados de Western Blots para cumplir sus obligaciones con el regulador, mostrando que el ARNm de la vacuna sólo expresaba la proteína spike y que su producto era consistente en todos los lotes. Mi investigación en dos partes para Trial Site News incluía la respuesta oficial de la AEM: «Estas cifras [imágenes de Western Blot] se extrajeron del expediente presentado y se insertaron en el informe de evaluación, lo que provocó una pérdida de calidad de la imagen. Además, el software de redacción utilizado por la EMA para preparar los documentos para su publicación a raíz de una solicitud ATD tiene un impacto en la resolución de los documentos.»

Esto está muy lejos de hacer una investigación específica sobre las acusaciones de fabricación de datos.

También he entrevistado a Brook Jackson, denunciante de Pfizer/Ventavia que afirmó que Ventavia (subcontratista de Pfizer) cometió fraude, puso en peligro la seguridad de los pacientes y encubrió errores y malas prácticas durante la gestión de los ensayos clínicos de Pfizer

Mentira #4: Cooke declaró (de manera confusa mientras buscaba la respuesta) que la vacuna «mRNA se descompone rápidamente en el cuerpo- en unos 9 días

Según el estudio de marzo de 2022, publicado en Cell por Röltgen et al. los investigadores revelaron que en lugar de degradarse rápidamente, el antígeno en espiga y el ARNm de la vacuna COVID-19 persisten durante semanas [8 semanas] en los Centros Germinales (CG) de los ganglios linfáticos.

No sé de dónde ha sacado Cooke lo de los 9 días. Debe haber estado recitando lo que le dijeron las compañías farmacéuticas. En retrospectiva, su «equipo de expertos» debería haber comprobado los hechos, ya que leen «toda la literatura».

Cuando se trata de la proteína spike producida por las propias células del cuerpo, gracias al ARNm vacunal sintético modificado, ni siquiera las propias compañías farmacéuticas saben cuánta proteína spike se está produciendo, dónde y durante cuánto tiempo Esto fue revelado en mi entrevista en profundidad con el Dr. David Wiseman, que evaluó críticamente una reunión crucial de la FDA en julio de 2022, para decidir si autorizaba las vacunas experimentales de ARNm de Pfizer y Moderna a bebés de tan sólo 6 meses de edad – que lo hicieron. Vale la pena ver un clip muy corto de la entrevista a continuación.

Mentira nº 5: Cooke: «El ARNm y las nanopartículas lipídicas permanecen principalmente en el lugar de la inyección»

Al revisar el propio Resumen No Clínico de Pfizer que se publicó a finales de 2021, en el volcado de datos de Pfizer ordenado por el tribunal, contenía estudios realizados en animales, que analicé para Trial Site News. Los estudios alarmantes mostraron que las nanopartículas de lípidos viajan al hígado, bazo, cerebro, glándulas suprarrenales, ovarios y testículos – básicamente a todas partes.

La Administración de Bienes Terapéuticos de Australia (su regulador de medicamentos) tuvo acceso a esta información en enero de 2021 en forma de su propio Informe de Evaluación No Clínico, que fue aún más condenatorio.

Seguramente, Cooke y su equipo de la AEM debían saber que las nanopartículas de ARNm y lípidos no «permanecen principalmente en el lugar de la inyección», si se hubieran molestado en leer los documentos necesarios.

También debían saber que Pfizer/BioNtech no realizó ningún estudio de seguridad de la vacuna relativo a: genotoxicidad, carcinogenicidad, farmacología de seguridad y farmacocinética. A pesar de que deberían haberse realizado, ya que las nanopartículas lipídicas (que rodean el ARNm modificado) contienen 2 compuestos completamente nuevos (y que se sabe que son tóxicos): ALC-0315 y ALC-0519.

En respuesta a la pregunta personal que le hizo Roos: «Con los conocimientos que tenemos ahora, ¿sigue convencida de que el proceso y la aprobación de las vacunas que utilizó la AEM fue lo correcto?

Cooke afirma rotundamente: «¡Lo volvería a hacer!»

Esa es la verdad.

Publicado originalmente en Sonia Elijah Investigates

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